El espacio de hoy lo dedicaré a la entrevista realizada a Martin Amis por La Avanguardia y publicada en el diario de hoy viernes 4 de marzo.
Amis presenta su novela, "La viuda embarazada" título que se inspira en una cita de Alexander Herzen para quien las revoluciones no dejan herederos sino viudas embarazadas.
La entrevista empieza con una frase controvertida del propio actor que dice así: "...y entonces, las chicas empezaron a actuar como chicos...", a lo que el escritor responde con: "No es un comportamiento que se haya repetido mucho a lo largo de la historia...los personajes todavía tenían el sueño de la cara igualitaria del feminismo y el machismo. Los hombres perdieron durante algunos años, y entonces fue cuando las mujeres empezaron a actuar como chicos. Hasta que vieron que no les interesaba actuar como chicos...". Símbolo de la ácida crítica sobre la revolución sexual de los 70 que empapa las líneas de la novela.
Muchos tildan la novela de "contrarevolucionaria", atributo que el propio autor desmiente afirmando que "no lo es, aquella revolución era inevitable y necesaria" y, a través de un sarcasmo feroz, simplemente intenta transmitir lo que significó la revolución sexual de sus años de juventud, la década de los 70 y un retrato de sus peripecias éroticas de aquellos tiempos; no es más que la muestra del alter ego de Amis.
El desenlace del libro sugiere que algunos buscaban en la prostitución o el sexo por Internet lo que no encontraron en aquella revolución, " a través de la red puedes elegir a quien quieras y eso es un privilegio burdelesco". En algún sentido lo que pretende el autor es simplemente mostrar el influjo qeu supuso latecnología en aquella época. En los años 70 la gente era promiscua y buscaba satisfacer sus necesidades sexuales sin cuestionarse el significado del sexo en sí. Actualmente la situación real está muy lejos de la década de los 70, en la que existe una separación real entre sentimientos y sexo. También opina que la pornografía es inevitable que sea consumida por los hombre pero cree que las mujeres deberían resistirse a la pornografía ya que ésta "trivaliza el acto que hace que el mundo se pueble. Ya que dar a luz es su poder supremo, la mujer debería ser muy reacia a la pornografía. Le roba su poder supremo, su significado, su valor".
En definitiva, para ser una sarcástica pero a la vez realista novela que nos traslada al mundo erótico de los 70.
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